200 días en 750words.com

Published on at writing , 5 mins.

Pego aquí mi sesión número 200 en 750words.com que escribí ayer. Sólo he corregido las faltas de ortografía, que escribiendo sin mirar son muchas. La escritura así me queda bastante errática, repetitiva, obvia, etc. pero es lo que tiene no borrar una coma ni pensar demasiado en el estilo mientras uno escribe. Lo primero son etiquetas que uso para registrar día a día dos parámetros, las horas de sueño y el ejercicio que hice el día anterior. Por cierto ya pasé el doble flock, que son 200 mil palabras escritas, aunque me da que cuando hago copy&paste por escribir desconectado no me las contabiliza. En fin ahora a por el Pegaso.

DREAM: 6.5

EJERCICIO: No hice nada ayer

200 días, hoy hago 200 días seguidos escribiendo en 750words.com. Bastante más de medio año. Aquí estoy escribiendo estas palabras para digamos celebrar, sí para celebrar que he sido constante con una ¿tarea?, no lo llamaría así pero bueno la vamos a llamar tarea o costumbre, que por otro lado no es un incordio y que no es un esfuerzo digamos incómodo la mayor parte del tiempo. Es cierto que en 200 días he escrito de muchas formas posibles, incluyendo hacer trampa con las zonas horarias porque llegaba tarde a escribir por una hora o dos, incluyendo meter paja porque ese día no tenía las ganas o simplemente las situación para poder escribir a gusto durante total, 15 minutos. No me sabe mal, son un porcentaje muy pequeño de los días y sobre todo han sido últimamente. Es curioso que he sido más constante cuando he estado de viaje (y me ha costado mucho más escribir o encontrar la ocasión conexión) que en casa donde la salida de la rutina diaria me ha llevado a retrasar la escritura a límites de pereza bastante inaceptables. Es normal, cuando uno tiene ya una rutina marcada bien clara, las cosas se hacen más ordenadamente, con menos sobresaltos o incomodidades porque, bueno yo soy así, necesito cada cosa en su sitio la mayor parte del tiempo. Y levantarme por la mañana, bien temprano, desayunar y sentarme a escribir es ya realmente una costumbre bien asentada. luego ya puedo ir a nadar o bien irme a trabajar directamente pero escribir y nadar son la mejor combinación que de momento he encontrado para arrancar el día con ganas. Eso y comerme una manzana al bajar del bus de camino al curro. Son pequeñas cosas pero no sé, me gustan y me sientan bien.

Pienso en los temas de los que escribía al principio de esta actividad y los que escribo ahora. Algunos son recurrentes como comer mejor o hacer más ejercicio, otros se han ido quedando atrás. Antes escribía mucho sobre Aída, ahora ya cada vez menos, y con el divorcio ya prácticamente resuelto supongo que menos aún. No es que me disguste escribir sobre eso, pero me gusta más escribir sobre el futuro que sobre el pasado. Es una de las cosas buenas de escribir por la mañana frente a escribir por la noche. Uno está más enfocado en lo que va a hacer y no en lo que ha hecho y eso me parece bien. Esta actividad me ha ayudado mucho a tomar decisiones, grandes (pocas) y pequeñas (muchas) que creo que no habría tomado tan fácilmente o tan deprisa de haberlo hecho de otra forma, con más cosas en la cabeza en ese momento. Escribir de este modo por las mañanas, como hoy, me ayuda a concentrarme en una cosa cada vez, supongo que por forzarte a escribir las lo cual hace que uno tenga que ir más despacio y de una forma más lineal, que se pueda representar con palabras. Supongo que de no escribirlas uno empezaría a mezclar, a ir adelante y atrás, bueno no sé, igual es simplemente una paja mental, qué más da.

Otra cosa importante es escribir con música neutra o con sonidos de la naturaleza. Por alguna razón soy más , no sé, estoy más concentrado cuando tengo sonidos mientras trabajo o hago algo. siempre llevo música en el bolsillo porque hasta para bajar al supermercado me gusta hacerlo con música. Me acuesto con música (de sonidos de la naturaleza) y me levanto y me pongo la radio o la música. Está siempre presente en mis actividades y en esta también. La única actividad en la que no tengo música es nadando y hasta ahí he pensado alguna vez de comprarme una radio .

En fin que hoy es un día un poco especial porque digamos subo de nivel, mi siguiente meta es cumplir el año escribiendo, para ya el verano que viene, y por otro lado, seguir escribiendo de tanto en tanto en esta terraza frente al mar, con el sol de la mañana calentando los huesos. Ayer lo pensaba, le puse a este blog en el que postearé estas palabras el nombre de una pequeña isla (muy turística de todas formas) de las Maldivas pero tal vez la Vila esa mi Mirihi particular, no creo que el colega que me deja venir a verle sepa el bien que me hace venir aquí , aunque tampoco tal vez, yo sepa cuánto bien le hace que venga yo para poder charlar de nuestras movidas. No sólo es necesario la escritura, también la conversación tranquila y sin censuras, sin miedo al rechazo o la vergüenza porque con los colegas de verdad no hay nada que ocultar.

Bueno que me enrollo y ya estoy en las 800 palabras. Mañana volveré a escribir desde casa como siempre y afrontaremos el final de año, ya se me ha ocurrido un buen propósito para el año que viene, pero lo tengo que madurar aquí un poco :-)

Cierro